Los criterios de adjudicación deben estar formulados de forma objetiva.
Los criterios deben estar vinculados al objeto del contrato.
Cuidado con las licitaciones de obras donde se valora lo accesorio (las mejoras) como principal.
En prestaciones de carácter intelectual (ejplo: redacción proyecto de obras) debe existir al menos un 51 % de puntuación relacionados con la calidad.
No hay un límite de criterios sometidos a juicio de valor y automáticos pero si más de la mitad de puntos son juicio de valor éstos los valora un comité de expertos.
No hay unos puntos mínimos para el precio.
Los criterios sociales tienen como “problema” que se cuestiona a menudo su relación con el objeto (¿debemos preguntarnos en qué mejora la prestación, cómo afecta a ella?)
Las mejoras tienen un límite del 2,5% cuando sean valoradas como juicio de valor y por un comité de expertos (en la práctica serán licitaciones con más de la mitad de criterios sometidos a juicio de valor y valoradas justo no como criterio automático sino criterio sometido a juicio de valor)
Cuidado con las fórmulas de valoración del precio.
La mejor oferta debe recibir siempre la mejor puntuación y debe valorarse el esfuerzo que realizan unos frente a otros al ofertar.
La forma típica de determinación del precio en el contrato de obras va a ser por precios unitarios. Debe motivarse muy mucho cuando el precio se fija tanto alzado o a tanto alzado por precio cerrado.
¿Cabe establecer umbrales de saciedad en la oferta económica? No parece que debieran caber aunque hay diversidad de opiniones en los tribunales de recurso ¿y en el resto de criterios? Se admite.
Como regla general en el procedimiento de oferta anormal: se abren los sobres 3 – C se evalúa si hay ofertas anormales, se realiza el procedimiento y después se puntúa. (HAY QUE DAR LOS PUNTOS AUTOMATICOS SOLO A QUIENES HAYAN PASADO ESE PROCESO DE VIABILIDAD..pueden variar las puntuaciones). En el p.simplificado no es así: solo se pide al mejor..y por tanto se han dado previamente los puntos